¿POR QUÉ ENSEÑAR JUDO?



Judo: aportes educativos

            La UNESCO declaró el Judo como el mejor deporte para niños de 4 en adelante. La práctica del mismo, posibilita infinidad de situaciones de aprendizaje, destacando valores tan importantes como el respeto, el compañerismo, la disciplina y la constancia. Favorece esta actividad el impulso de todas las capacidades del niño. Apostando por una educación integral, no sólo física sino también humana, potenciando, por medio del conocimiento de este deporte, todas sus posibilidades psicomotrices y de relación con los demás. Haciendo uso del juego como elemento integrador y dinamizador, introduciendo la iniciación técnico-deportiva de forma adaptada.
           
            Su práctica puede hacerla el niño de 4 años de edad hasta que el individuo lo desee; después que un practicante de Judo inicia las clases y empieza a sentir la verdadera filosofía y el encuentro de la máxima “ceder para vencer”, aplicando los dos principios mencionados anteriormente, Sei Ryoku Zen Yo y Jita Kyoei.
            Pero no sólo se puede aplicar estos principios a la mejora del cuerpo humano, también puede ser aplicado al perfeccionamiento de las instituciones, de las relaciones sociales y de los métodos de trabajo.
            En correspondencia con el Jita Kyoei, debe tenerse siempre presente aquellas palabras de Kano quien dijo: “el fin último del judo es el perfeccionamiento de uno mismo”.
            Cuando se vivencia cada uno de estos fundamentos y principios filosóficos y se comprende en toda su esencia es cuando no se desea dejar de practicar y lo que hace el judoka es adentrarse en lo más profundo de la disciplina, adquiriendo una forma de vida en la que comparte su aprendizaje con todo lo que le rodea.

Judo: Su enseñanza en tiempos modernos

            Tal y como se ha planteado en párrafos anteriores el Judo resulta un deporte que prácticamente ha nacido con el propio hombre. Por lo tanto no es de extrañarse que sus métodos de enseñanza sean tan antiguos como la disciplina misma.
            Si bien se reconoce el gran aporte hecho por Jigoro Kano al Judo, no podemos negar que sus ideas han sido revolucionarias siglos atrás, pero hoy en día ya no pueden ser vistas de la misma manera.
            Además el continente Asiático es considerado como la cuna de las artes marciales, pero no resulta igual en materia de Educación Física.
            Resulta conocido que a partir de las últimas décadas ha habido grandes cambios en materia de educación. Nuevos modelos y sistemas de enseñanza, basados en las aportaciones de la didáctica, la psicología evolutiva, la psicología del aprendizaje y de la instrucción, etc., han aparecido y con ellos nuevas metodologías para la enseñanza de las actividades físicas y deportivas; y el Judo no puede permanecer ajeno a estos cambios.
            Según señalan Villamón y Molina, los “modelos técnicos” han sido durante largo tiempo los hegemónicos en la enseñanza del Judo en todos los países. La característica fundamental de los mismo es la especialización precoz, es decir, el aprendizaje, perfeccionamiento y la automatización de los gestos técnicos de la disciplina deportiva desde el mismo momento en que la persona se inicia en la práctica de la actividad. Una marcada tendencia hacia la orientación del rendimiento deportivo, la falta de adaptación a la naturaleza infantil y la pobreza desde un punto de vista educativo (ya que se ocupa de la mera adquisición de capacidades técnicas), son otras de las características que marcan a estos modelos técnicos.
            Por otra parte, bajo la denominación de “modelos alternativos” se encuadrarían aquel conjunto de propuestas que, según Villamón y Molina, se caracterizan por partir de los intereses y experiencias para elaborar las respuestas y, por tanto, elaborar nuevos conocimientos. Muy al contrario de lo que ocurre en el modelo técnico, donde se reproducen determinados estereotipos de ejecución. Asimismo, los modelos alternativos tienen como denominador común la atención y el respeto tanto por el estadio de desarrollo del alumno como por sus capacidades de aprendizaje. 
            De este modo se proponen metodologías más libres y activas, ligadas al descubrimiento. Así encontramos aquellas en las que el juego se configura como el principal recurso para desarrollarlas; o la resolución de problemas que también ha sido utilizada como el elemento esencial de diversas propuestas que persiguen favoreces esta adquisición de habilidades de lucha contextualizadas.
            Asimismo, desde la perspectiva de la comprensión de los juegos deportivos, donde el contexto y los problemas de juego son inseparables y se relacionan con la táctica, se han desarrollado investigaciones tendentes a abogar desde la misma por un modelo de enseñanza. Un primer intento, en este sentido, sería el realizo por Méndez (1998); al aproximarse a la enseñanza del Judo desde su táctica identificando algunos factores determinantes de la misma como: las normas en la aplicación de fuerzas, los movimientos preparatorios y de esquiva, los encadenamientos y las combinaciones, las contras, etc.
            Ahora bien, resulta casi imposible que un docente de educación física obtenga el cinturón negro de Judo y con él todos los conocimientos que lo habiliten para brindar una clase. Así como resulta menos probable aún que un Maestro de Judo maneje todas las estrategias y recursos pedagógico-didácticos que domina un docente. Es por eso que a lo largo de estos párrafos se intenta demostrar la interrelación entre el Judo y la Educación Física; abriéndose de esta manera una nueva puerta en el campo de acción de los docentes. Un puerta que de ser atravesada con las herramientas necesarias dará lugar a una nueva era del Judo, pasando a ser una actividad mucho más humana, inclusora y formadora de lo que lo es hasta el momento
           
Habiendo expuesto estos principios, estamos en condiciones de afirmar que en este espacio, buscamos seguir los planteamientos de iniciación deportiva más modernos, postulando a favor de modelos alternativos de enseñanza dentro del contexto del Judo y de las actividades de lucha. Nuevos cambios que deberán ser introducidos principalmente por estos docentes que con su aporte enriquecerán la disciplina.